Thursday, September 27, 2007


ME AUSENTARÉ UN TIEMPO.
ABRAZO.

Saturday, September 15, 2007


CON EL VIENTO
A veces la ausencia puede sentirse con una fuerza superior a la de la gravedad. A veces el dolor pesa y parece sujetarnos al suelo. A veces el corazón, ágil incertidumbre sin descanso, se hace plomo en el pecho. Y nos posee una infinita nostalgia de las alas. Y los pájaros son ese sueño cercano e inasible de crueldad bellísima. A veces pasan esas cosas. Entonces puede ser el momento de convertir al viento en aliado.
Aprendí a amar el desorden del viento y a entregarle mi pelo en ritual arcaico. Me ofrecí a su caricia y a su furia: testigos son acantilados nórdicos y las humildes hojas de las plantas. Con el viento fuí entendiendo esa dura lección del desapego, ésa de amar las cosas sin querer poseerlas. Con el viento supe del vértigo y del miedo al vacío. Y sólo así supe que podía vencerlos.
HAIKUS DE LA AVIADORA
Se enciende el tiempo
despiertan los motores
arde el silencio
Luz que se eleva
como plata en las alas
ángel de tierra
Músculo y viento
indomable caricia
guerrera al vuelo.