Thursday, October 05, 2006

METAMORFOSIS

Él LE DIJO A ELLA:


Miénteme.
Con un pequeño esfuerzo
disfraza la verdad
y dámela,
porque así seré alguien
al menos un minuto.
Cuando uno es la sombra
de la luz de los otros
agradece
la piedra que le tiran
contra el muro en el que se proyecta.
Las almas
en estado de orfandad se apresuran,
como mendigas ciegas,
a recibir socorro con manos extendidas.
Es huérfano
aquel que está desnudo de caricias,
ésas que siempre envuelven el cuerpo como un manto
protector frente a las embestidas de los días.
Un pobre es un espíritu sin nombre
y un andar lastimoso,
pero su anhelo
va siempre más allá
del ánimo común de los mortales:
tiene tan poco,
está tan cerca de la nada absoluta,
que su deseo es
alcanzar, para siempre,
el estado de gracia.
Miénteme.
Y dame ese minuto
de reconciliación con la existencia.
Después
deja que millares de ríos nos separen:
esa distancia nunca será mayor
que la verdad entre tú y yo.


ELLA ENTONCES COMENZÓ A MENTIRLE. MIENTRAS LO HACÍA, ÉL SE VOLVÍA MÁS Y MÁS HERMOSO. Y LA MENTIRA, A MEDIDA QUE HABLABA Y LE MIRABA, SE CONVERTÍA EN VERDAD.

23 comments:

Carz said...

Miénteme...
aunque sea mentira.

Ángel Fondo said...

No puedo evitar esa melancolía que me atrapa al contemplar las hojas caídas, arrastradas por ese viento que se adueña del silencio y que en íntima armonía con el cielo construye ese paisaje típico del otoño. No me importa, casi diría que gozo esa melancolía. Tu sonrisa imaginada siempre será bienvenida y compartida, con o sin misterio algo muy bello nos va uniendo. Cambiaremos el helado por un chocolate caliente...
Siempre he intentando reconocer las mentiras amigas de las malintencionadas, recuerdo aquella maravillosa película de Nicholas Ray, Johnny Guitar...
—Miénteme. Dime que me has esperado todos estos años. Dímelo.
—Te he esperado todos estos años.
—Dime que habrías muerto si yo no hubiera vuelto
—Habría muerto si tú no hubieras vuelto.
—Dime que me quieres todavía, como yo te quiero.
—Te quiero todavía como tú me quieres.
—Gracias. Muchas gracias.
Que importa la verdad, si hay mentiras tan bellas. Luego la vida ya nos curvará el lomo con las grandes verdades.
Hay mucho más reflejado en tu poema, pero esto no es más que un simple comentario, ya demasiado extenso.
¿Tus escritos? ¿Dónde? ¡Por favor!
Un beso.

Sintagma in Blue said...

¿Y qué se hace con el advenimiento de la verdad?

UMA said...

Igual he mentido y tambièn no,
igual se volviò màs hermoso para vivir otra mentira, millones màs en distancias mas ciertas que esta enorme franja de agua vadeable.
Nada, solo pensamientos vagos que nacen de tus preciosas letras, un gran viaje, Quantum, amiga tan cercana.
Te dejo mis besos y un abrazo enorme.

Lala said...

Son inevitables... creo que más allá de una mentira, hablamos de verdades eclipsadas, y se sabe, que los eclipses duran poco, y que después, los ojos se quedan repletos de estrellas...

besos!

Princesa Dariak said...

Metamorfosis.
Sabes? Me he quedado pensando... y me asombra el final, y es tan cierto...
El amor todo lo cree, aùn una mentira encubierta, por esto, el amor conmueve el concepto y lo transmuta en verdad...

Un abrazo de Luz.

fgiucich said...

Hay momentos en la vida, que resulta muy agradable vivir de mentiras, hsta que llega la verdad. Muy buen poema. Abrazos.

Anonymous said...

cual es el limite?
lo que hacemos verdad.y ya no importa cual sea el limite.
saludos.

Gabriela Monroy Calva said...

Me encanta y me recuerda una balada...miénteme por piedad yo te lo pido...un beso y gracias por tu visita
Gab

Simplemente Olimpia. said...

Quantum...cómo decirte que en ese momento de la mentira sólo es ilusión momentanea? que sólo es un alivio al alma en vela...un espejismo de lo que no llegará a ser... y pudo haber sido...
Será por que prefiero siempre el silencio a la mentira...mil veces cien.
Mi beso más verídico.
Olimpia.

DjPixel said...

Interesante, creo que todos en general alguna vez hemos mentido, en mayor o menor grado, pero mentiras al final.

Muaaaa.

quantum said...

Carz,
siempre que te digo algo es de verdad, aunque luego no estés de acuerdo conmigo.

quantum said...

Robin,
Sigamos compartiendo sonrisas y palabras, compartamos el otoño y hasta esa melancolía que nos atrapa y que podemos disfrutar a dúo.
Qué oportuno el diálogo de Johnny
Guitar que reproduces, perfecto para la ocasión, perfecto en sí mismo.
Me sabes paseante permanente de tu bosque.

¿Te refieres a mis libros de poemas? Placer para mí compartir mis escritos contigo.

Te abrazo.

quantum said...

Sintagma,
mejor, creo yo, no esperar pasivos ese advenimiento. Mientras tanto podemos ir buscándola, reconociéndola, o hasta creándola, como cuando escribimos un poema.
Besos ezules.

quantum said...

Quise decir azules ¡Ay!

quantum said...

Uma, Cercana Sol del Muelle,
gracias por esos pensamientos tuyos hechos palabra. Tienes la facultad de comunicar emoción verdadera, se hable de la mentira o de lo que se hable: siempre.
Toujours avec toi, ma prochaine.

quantum said...

Julieta,
así se han quedado mis ojos después de leer tu comentario: llenos de estrellas.Todo un regalo.
Gracias y un beso enorme.

quantum said...

Querida Pricesa,
me llena de gozo comprobar que has penetrado directamente en el sentido del poema. Una vez más, el filo de tu espada es indoloro pero preciso. Y rápido como la luz.

Un enorme abrazo, amiga.

quantum said...

fgiucich,
pienso que la verdad llega de muchas formas, que no siempre es un ajuste de las palabras a la realidad, porque la imaginación y el amor también crean realidad, crean verdad. Tus propios poemas, por ejemplo,se basen o no en hechos reales, son verdad en sí mismos.
Un gran abrazo, como siempre, amigo mío.

quantum said...

Mariana,
hablas de "lo que hacemos verdad", entonces, si es así, me alegra que pienses que nosotros somos parte activa. Yo, desde luego, así lo creo.
Gracias por venir. Te mando un beso

quantum said...

Gab,
Te agradezco muchísimo tu visita, si pudiera, te ofrecería un café y charlaría contigo. Pero con café o sin él seguimos.
Besos y cuidate mucho.

quantum said...

Olimpia, amiga,
no creo en la mentira como tal, jamás me sentiría satisfecha con lo que tú bien llamas "ilusión momentánea". Pero creo en el poder transformador del amor y creo también que la verdad no es sólo la adecuación de la palabra a la realidad: la palabra también crea realidad. Por último, permíteme un recuerdo a Platón y a John Keats y a su identificación de verdad y belleza, en la que creo.
Mi beso para ti, Olimpia: sinceramente.

quantum said...

Cinque,
Claro ¿quién no ha mentido alguna vez? Y, sí, mentiras al final. Pero no todas iguales. Imaginate la diferencia entre una mentira cruel y otra que se hace por amor...
Te sigo visitando, señor ogro.
Muaaaaa